El moble de les botelletes

El meu avi del bosc feia una col·lecció de botelletes de licor. Les tenia totes posadetes dins un armari que tenia dues portes lliscants de vidre de color groc. Dins, les botelletes s’ordenaven en fileres com si de diputats del Congrés es tractessin. Totes tenien una mida que respectava a la resta i deixava que, d’un cop d’ull, tothom pogués admirar la quantitat de botelletes que hi havia. Fins i tot, va arribar el dia en què el meu avi tenia tantes botelletes, que van començar a envair altres armaris i altres prestatges del mateix moble.

Jo me n’adonava de com de fràgil era tot aquell muntatge del meu avi i, per això, no m’hi acostava gaire, encara que em fascinava. Com podia ser que hi hagués tantes botelletes dins un armari? I el més important: d’on sortien tantes botelletes d’aquella mida si les de casa eren grans? Era un moble molt enigmàtic. De fet, per mi, mai no havia estat una col·lecció. Semblava com un d’aquells éssers del paradís d’Adan i Eva; d’aquells que tal i com van aparèixer es segueixen perpetuant avui dia.

No va ser fins que vaig veure el meu cosí David portar-li botelletes petites d’un viatge, que em vaig adonar de la magnitud del moble de les botelletes. El número de botelletes no havia estat sempre el mateix. Segurament, el moble de les botelletes havia començat amb dues solitàries mostres, però la resta eren art de la constància del meu avi en recollir botelletes dels seus viatges i dels viatges dels seus familiars, amics i coneguts. Fins el punt, d’haver decidit destinar un moble sencer per posar les botelletes.

Ara s’ha de desmuntar el pis dels avis del bosc i jo penso: què farem amb tantes botelletes?

Alegría.

Hoy estoy feliz y vosotras, sois el motivo. Un placer pasar la noche con vosotras ayer!

La alegría de mi vida

Por fin puedo contaros la alegría que me da bailar, la alegría que me da reír, la alegría que me da viajar o la alegría que me da beber y comer mucho, la alegría que me da emocionarme, la alegría que me da compartir... con vosotras. Porque han sido años ya de bailar, reír, compartir...y por increíble, por milagros que me parezca, cada vez me gustáis más! Ya sé que os lo he dicho muchas veces, pero el milagro está allí, en un grupo de chicas, de edades diferentes, de vidas diferentes que se encuentran...en momentos y por razones distintas de su vida; para, en definitiva, bailar. Y bailando nos hemos ido conociendo no sólo entre nosotras sino a nosotras mismas. Personalmente, puedo decir que habéis sido una pieza clave en mi vida para reencontrar tanta alegría. No os parece increíble que uniendo personalidades tan fuertes, tan ricas, tan maravillosas en unas clases de baile, en unas terrazas con cervecitas, en una Bartra, en un barrio de Sevilla, en una playa de la Fosca o en un escenario sin luz y sin música una pueda sentir tanta alegría? Porque a mí me sigue sorprendiendo cada día.

Us estimo molt lokes,

Dedicado a una contraseña muy bien elegida.

Si acaso

Hoy me apetecía calentar con la Callas. Siempre va bien... no por hacer flamenco en clase solo tenemos que escuchar flamenco. Es más, creo que es rico escuchar otras melodías que no sean flamencas, pero en cambio que transmitan, que emocionen... que no necesites saber lo que sus letras significan, pero que sepas lo que significan solo por como están interpretadas.

Hoy era la Callas... curiosamente ha dejado en el ambiente un halo de tristeza, de melancolía... de alguna manera el grupo se ha armonizado con ella y a todas seguramente nos invadía la misma sensación...

De golpe, gira y gira, y vuelve a girar... y sigue girando... y girando girando hemos acabado con un fandango... pero en definitiva, las dos melodías tenían la misma esencia.

Me encantaría descubrir vuestras músicas... las que os emocionen ... una selección de vuestras músicas... y una manera de descubrirlas... si acaso yo me haré la despistada... y esperaré a ver si hay suerte y voy recibiendo CD´s eso sí... grabados.

http://www.youtube.com/watch?v=KVRhuQWS4tc

Lo nuevo y lo viejo

[zapatitos nuevos de tacón]

El Libertango de los vestuarios